LA MAFIA SE SIENTA A LA MESA (3º ED.) 146b1



Poco saben que los «padrinos» del «Honorable la sociedad» prepara las cartas de su ágapes con la misma cura y esmero que sus delitos. La expresión cucinare él delitto («cocinero el delito») da una idea de la importancia que la Mafia adscribe en la gastronomía: ya desde sus principios, esta organización ha totalled alrededor de la mesa con objetar para celebrar aniversarios y éxitos, urdir estrategias nuevas… O fin de pose en las actividades y los días de algún miembro de la Familia. Y la comida constituye un liturgia, un ritual en qué cada detalle es perfectamente planeado. En Los asientos de Mafia en la mesa describen las comidas, cenas o banquetes que, para su importancia histórica o legendaria, para su originalidad o su cariz burlesco, ocupar un sitio preeminente en la gastronomía mafiosa desde entonces 1738, año en aquel lo ha fundado esta sociedad. Entonces la Mafia organiza ágapes así para preparar Garibaldi desembarco en Marsala el año 1860 come para distribuir el tráfico de caballos durante la primera guerra mundial, o para celebrar -en un famed festín de cincocientas vajillas de plata- el «inmate» del Bronx para Maranzano. Así, los nombres de Mussolini, Roosevelt, Churchill o del general Enladrilló Chiesa blend , entre bocado y bocado, con el del el señor Vito, Calogero Vizzini, Genco Russo, Luciano Afortunado o el último emperador, el abogado mafiós Vito G. Los gourmets verán satisfechos su curiosidad, desde entonces ofrecen las cartas, los vinos y las recetas del comidos mafioses más notables. Variado de estas recetas han sido inventadas por el más famed caciques y dirigentes de «familiares», del cual el prestigio, según se dice, tiene que más en su talento culinario que en su forma para manejar el metralleta. f4z3p