EL CUERVO BLANCO 52m1c

Rufino José Cuervo era un hombre inusual: en el país de los doctores aspirantes en la presidencia o era doctor o aspirado en nada. Para su familia había nacido para el poder, pero lo despreció. A pesar de que no ha pasado para el universitario y ha enseñado sólo, ha logrado para saber qué nadie de esta lengua. Ha dejado su país no para regresar y ha ido en Francia dónde tiene emprendido un trabajo colosal, el Diccionario de construir y dieta de la lengua española, la más compañía delirante de la carrera hispánica. Ignacio de Loyola, Teresa de Ávila, Cortés, Pizarro, señor Quixot y altri de su medida, comparado con es apprentices de desmesura.friedrich Agosto Pott, El lingüista grande de su tiempo, en una tarjeta en latino aquello le ha escrito desde entonces Alemania lo ha llorado corvus albus, «el cuervo blanco», aludiendo con la comparación en su nombre y en un ser excepcional entre el de su especie, el del país del Andes lejano y extraño. El Diccionario se le ha quedado inconcluso. I problema quizás de modo que un sencillo mortal en un mísera la vida pretendió comprender tanto, toda una lengua, el dios ha no quiso que lo lo acabó. Tiene quiso en cambio (designios en ellos inescrutables) que este hombre puro, generoso y del alma grande introducida en Glòria. El cuervo el blanco comienza y puerta en plazo feliz su proceso de canonización. En san Rufino José Cuervo puede le rogar entonces con devoción y petición con confianza. 1h4m36